Páginas

domingo, 24 de julio de 2011

Apéndice tercero - Lilli

Meses después

-Todo ha cambiado.

Asentí.

-¿Cómo estábamos viviendo nuestra vida? - preguntó - ¿Cómo la dejamos escapar? No nos dimos cuenta... se escurría entre nuestros dedos.

-Estábamos ciegos - respondí -. Ciegos en nuestra propia felicidad que no supimos ver lo que ocurría a nuestro alrededor. Ella... ella siempre fue una genial actriz. Consiguió engañarnos, con esa alegría... ¿Cómo no pudimos darnos cuenta?

-Ella era... tan especial...

-Única. Era única - le corregí -. Y... tú nunca pudiste oírla cantar, Carlos. Era... era impresionante. Rasgaba la guitarra con tanto amor que... dios, no hay manera de describirlo - reprimí un sollozo; no era momento de sucumbir -. No puede haber terminado todo así, de esa manera.

-Fue culpa mía.

-Eso no es verdad.

-¡Sabes que lo es! - me gritó, desesperado - ¡Sabes que fue culpa mía! No lo admitirás nunca, pero tú también me culpas. ¡Todos lo hacen! Y lo peor es que tienen razón. Yo la maté, Lilli, fui yo y sólo yo.

Le giré la cara de una bofetada. Fuerte, precisa.

-No digas eso. Nunca vuelvas a decirlo.

Me miró con los ojos llenos de lágrimas y, en ese instante, me pregunté cómo saldríamos de esta. Era algo que... nos superaba.

4 comentarios:

Marina Vargas dijo...

O.o ¿Lilli esta muerta? No puede ser ¿Qué ha pasado?

Actu pronto ;)

Un beso

Anónimo dijo...

¿M... mu... murió? No, no puedes haberla matado, Lu, ¡Mala! ¿Cómo pudiste matarla? D:
¡Espero pronto el próximo, lo necesito!
Girl

Pía Baroja dijo...

Gath... Oh no! Me gusta cómo va la historia. Pero continua pronto por favor!!
Un beso :)

Pía Baroja dijo...

Te he dejado un premio en mi blog: http://piabaroja.blogspot.com/2011/07/premio-el-blog-mas-hermoso-que-he-visto.html
Besos!